Las claves sobre los implantes dentales
1. ¿Qué son exactamente?
Un implante dental es una raíz dental artificial de forma cilíndrica y hecha de titanio, que se implanta en la mandíbula mediante una intervención quirúrgica. Después de un proceso que conocemos como osteointegración, el implante se integra en el hueso maxilar y realiza la función de la raíz del diente perdido.
2. ¿Cómo es el proceso de colocar un implante?
El proceso de colocación de un implante dental dura unos cuantos meses y pasa por diferentes fases:
- Estudio previo de la salud bucodental del paciente. Es importante que el paciente tenga la boca completamente sana y no presente complicaciones previas al tratamiento, como la caries o la gingivitis. En ese caso primero se deberán tratar estas enfermedades y después proceder a la colocación del implante.
- Colocación del implante. En esta fase se produce la osteointegración y suele alargarse entre dos y cuatro meses, en función de cada paciente. Durante este tiempo se puede llevar una prótesis provisional.
- Colocación de la prótesis definitiva. Cuando el implante ya se ha integrado se coloca la prótesis definitiva.
El proceso suele ser indoloro y lento, y el resultado es una boca natural, bonita y funcional durante muchos años.
3. ¿Duran toda la vida?
Es difícil pronosticar en general la vida de un implante, ya que depende de muchos factores: zona donde se encuentra, higiene y cuidados del paciente; pero los implantes dentales suelen tener una duración de entre diez y veinte años.
Para que los implantes duren toda la vida conviene mantener una serie de cuidados, el más importante es una buena rutina de higiene bucodental, la acumulación de placa bacteriana alrededor de los tejidos de los implantes dentales genera una infección llamada mucositis. Si no se detecta y trata a tiempo, esta infección da lugar a la periimplantitis, la gran complicación de los implantes dentales. En sus fases más avanzadas, la periimplantitis puede suponer el fracaso del implante dental. En este sentido es fundamental acudir al dentista con regularidad, aunque el proceso de los implantes haya sido un éxito.
Unos buenos cuidados en casa y las visitas al odontólogo serán las claves para sonreír como si no llevaras un implante durante mucho tiempo.